Acero de alto carbono: 0,60 % – 1,0 % de carbono
Proceso de producción de acero de medio carbono
El acero de medio carbono suele contener entre un 0,30 % y un 0,50 % de carbono, junto con pequeñas cantidades de manganeso (normalmente entre un 0,60 % y un 1,65 %). Este mayor contenido de carbono, en comparación con el acero de bajo carbono, resulta en una mayor resistencia y dureza, pero una ductilidad y soldabilidad ligeramente menores.
(1) Temple y revenido. La estructura es de bainita revenida. Esta estructura presenta buenas propiedades mecánicas integrales, alta resistencia, buena plasticidad y tenacidad. El acero utilizado para el temple y revenido debe tener una buena templabilidad para garantizar una estructura y un rendimiento uniformes en toda la sección transversal de la pieza templada y revenida. En comparación con el acero aleado, el acero al carbono presenta una templabilidad deficiente, por lo que solo es adecuado para el temple y revenido de piezas de acero de medio carbono con secciones transversales pequeñas.
(2) Revenido a baja temperatura después del temple. La estructura es de martensita revenida, que presenta alta resistencia y una plasticidad y tenacidad adecuadas.
(3) Revenido a baja temperatura tras el temple por alta frecuencia. La estructura de la capa templada por alta frecuencia es de martensita oculta extremadamente fina, y la martensita revenida se obtiene tras el temple a baja temperatura. Este tratamiento puede lograr un efecto similar al de la carburación. El revenido o normalizado se realiza generalmente antes del temple por alta frecuencia. Por lo tanto, tras el temple y revenido por alta frecuencia, el núcleo de la pieza presenta alta resistencia, buena plasticidad y tenacidad, mientras que su superficie presenta alta dureza y buena resistencia al desgaste. Además, se genera tensión de compresión en la superficie de la pieza templada por alta frecuencia, lo que le confiere un alto límite de fatiga y una larga vida útil.
(4) Temple isotérmico. La estructura es de bainita, que presenta alta resistencia, buena plasticidad y tenacidad.
(5) Revenido a temperatura media tras el temple.
La microestructura es de bainita revenida. Algunos aceros de medio carbono se someten a normalización como tratamiento previo al tratamiento térmico final. El objetivo es refinar los granos, reducir las irregularidades de la estructura del acero, obtener estructuras uniformes de perlita y ferrita, y preparar la estructura para el tratamiento térmico final.
Tras el temple y revenido, el acero de medio carbono se utiliza principalmente para fabricar diversos ejes de transmisión, bielas, embragues, pasadores de eje, pernos, etc. Tras el temple a alta frecuencia y el revenido a baja temperatura, se utiliza para engranajes, husillos de torno, ejes estriados, árboles de levas y semiejes sometidos a cargas de impacto y que requieren resistencia al desgaste. El acero de medio carbono, normalizado o sin tratamiento térmico, se utiliza para fabricar varillas de tracción, manguitos, fijaciones, arandelas y manijas con cargas bajas. El acero de medio carbono con mayor contenido de carbono se utiliza para fabricar resortes y alambres de acero.